Una mujer se ha perdido. Conocer el delirio y el
polvo. Se ha perdido esta bella locura, su breve cintura, debajo de
mí. Se ha perdido mi forma de amar, se ha perdido mi huella en su
mar. Veo una luz que vacila y promete dejarnos a oscuras. Veo un
perro ladrando a la luna, con otra figura que recuerda a mí.Veo más,
veo que no me halló. Veo más, veo que se perdió. La cobardía es
asunto de los hombres, no de los amantes. Los amores cobardes no llegan a
amores, ni a historias, se quedan allí. Ni el recuerdo los puede
salvar, ni el mejor orador conjugar. Una mujer innombrable huye
como una gaviota y yo rápido seco mis botas, blasfemo una nota y apago
el reloj. Que me tenga cuidado el amor, que le puedo cantar su
canción. Una mujer con sombrero, como un cuadro del viejo
Chagall, corrompiéndose al centro del miedo y yo, que no soy bueno, me
puse a llorar. Pero entonces lloraba por mí, y ahora lloro por verla
morir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario